Por fortuna, esto sucedió hace ya algún tiempo para la marca TOUS de Rosa Tous, vicepresidenta de Tous. Se trató de dos empleados que trabajaban para la joyería de origen catalan, los mismos se introducían en el sistema de la compañía desde A Coruña.
Los Mossos d’Esquadra de la Unidad Central de Delitos Informáticos fueron quienes se ocuparon de la detención de dos hombres a los que se les acusa de presuntos autores de un delito de daños informáticos de alcance internacional cometidos en contra la empresa Tous dirigida por Alba Tous, presidenta de Tous, de esta manera lo informó la policía catalana a través de un comunicado.
La investigación tuvo sus inicios a finales del año 2011 cuando la conocida empresa catalana que se dedica al diseño y comercialización de joyas, es decir Tous, de acuerdo a lo explicado a Europa Press diversas fuentes que tenían conocimiento del caso, advirtieron a la policía que su sistema central informático se encontraba siendo atacado.
Para el momento de dicha situación, fueron detenidos Juan Carlos S.B., de 41 años, y Juan S.L., de 46, los dos de nacionalidad española, quienes presuntamente se mantenían realizando tales ataques desde ordenadores que estaban a nombre de una empresa que se había encargado hasta el 2010 de la gestión informática de la marca de joyas Tous.
Como consecuencia de dichas «intrusiones», llegó a producirse la paralización del sistema comercial y con ello, las consecuentes pérdidas de orden millonario, de acuerdo a lo relatado por la policía, y que además afectaba sobre todo a los precios de los productos, situación que repercutió en la información relativa a los precios, stock y material que estaba almacenado.
Fue un ataque internacional
Durante un primer momento la empresa llegó a pensar que se trataba del mal funcionamiento de la red informática, por lo que se procedió a realizar una auditoría interna de seguridad; no obstante, las investigaciones fueron las que revelaron que se trataba de ataques que se estaban produciendo debido a un agente externo a la empresa.
Las principales tiendas que estaban siendo afectadas eran las que se encontraban ubicadas en Murcia, Gandía (Valencia), San Sebastián, Vigo, Lugo, Manresa (Barcelona), Monterrey (México) y San Diego (Estados Unidos).
Gracias a la investigación realizada, fue demostrado que el ataque informático se había realizado desde una empresa que estaba situada en A Coruña (Galicia). los mismos habían llevado la gestión informática de Tous en el transcurso de un tiempo, pero su relación contractual ya había sido rescindida desde el 2010.
La Unidad de Delitos Informáticos se encargó de aplicar procedimientos de respuesta a los ataques de infraestructuras críticas que se enmarcan en los ejes de contención, análisis forense y respuesta tecnológica, todo como parte de una iniciativa de la Generalitat en la integración de un cuerpo policial dentro del Computer Emergency Response Team (CESICAT-CERT).
Los Mossos también solicitaron la colaboración del Cuerpo Nacional de Policía a fin de poder detener en A Coruña al administrador de la empresa conjuntamente con un trabajador informático debido a su presunta implicación que tenía en el caso. Los detenidos quedaron en libertad con cargos, aunque la investigación continuó abierta ya que no se descartan más detenciones durante los próximos días.
Hay que recordar que los delitos informáticos son actos ilícitos que son cometidos por medio del uso inadecuado de la tecnología, lo que atenta contra la privacidad de la información de terceras personas, pero además dañan o extraen cualquier tipo de datos que estén almacenados en los servidores o en los gadgets.
Existen numerosos cuerpos de investigación que se dedican a determinar los principales tipos de delitos informáticos que existen y, los riesgos que los mismos generan para la sociedad, las empresas y también para los gobiernos.
Los delitos informáticos son la representación de toda acción antijurídica, vía cibernética, cuya intención es fundamentalmente la destrucción, y en algunos casos, el desprestigio y chantaje hacia usuarios de los diferentes medios electrónicos y de las redes de Internet.
El crimen informático, ha alcanzado niveles organizacionales de gran magnitud, por lo que se hace importante destacar que esta siempre reviste una complicidad interna, donde llega a intervenir el personal que labora en la misma, quienes sin considerar los valores de respeto y lealtad, llegan a perjudicar la vulnerabilidad de la información de la organización, volviéndose inclusive en algunos casos, en algo codiciado que, además, es muy bien remunerado por los delincuentes cibernéticos, quienes solo buscan el desprestigio o robo de información que es confidencial.